Entradas populares

martes, 5 de noviembre de 2013

Octave Mirbeau - El jardín de los suplicios (fragmentos)

«—Eres un niño —repitió Clara—. Y hablas como en Europa, cariño. Y tienes escrúpulos idiotas, como en Europa. En la China la vida es libre, feliz, total, sin convenciones, sin prejuicios, sin leyes... Por lo menos para nosotros. La libertad no tiene más límites que uno mismo, y el amor solo lo limita la variedad triunfante del propio deseo. Europa y su civilización hipócrita y bárbara es la mentira. ¿Qué otra cosa hacéis en Europa más que mentir, mentiros a vosotros mismos y a los demás, mentir a todo lo que, en lo más hondo de vuestras almas, reconocéis como verdadero? Os veis obligados a fingir un respeto exterior hacia personas e instituciones que sabéis absurdas y seguís cobardemente ligados a unas convenciones morales o sociales que despreciáis y condenáis, que sabéis totalmente faltas de cualquier fundamento. Esta permanente contradicción entre vuestras ideas, vuestros deseos y todas las formas de vida muertas, todos los vanos simulacros de vuestra civilización, es lo que os hace tristes, confusos, desequilibrados... En este conflicto intolerable, perdéis toda la alegría de vivir, toda sensación de personalidad, porque a cada momento os comprimen, os impiden y detienen el libre juego de vuestras fuerzas. Esta es la herida envenenada, mortal, del mundo civilizado. Entre nosotros las cosas son muy diferentes, ya lo verás. Poseo en Cantón, entre jardines maravillosos, un palacio en el que todo está dispuesto para la vida libre y el amor. ¿De qué tienes miedo? ¿Qué dejas atrás? ¿Quién se preocupa por ti? Cuando ya no me quieras, o cuando seas demasiado infeliz, te irás...».

No hay comentarios:

Publicar un comentario